Páginas

lunes, 2 de mayo de 2016

Y QUE TAL LA MITOLOGÍA GRIEGA?

Me encantan las historias mitológicas, la Griega, la Romana; esas me gustan mucho, son tan fantásticamente buenas que hoy me atreví a traer a mi blog algunos de aquellos nombres y sus fabulosas historias.


Y entonces me siento cómodamente en mi sillón de los sueños, cierro mis ojos y plácidamente me elevo hasta el cielo……Y comienzo situándome en la parte más árida de Grecia, entre Tesalia y Macedonia, donde se eleva la silueta del Monte Olimpo en una sucesión de contrafuegos rocosos. 

Su cumbre, coronada de centelleantes nieves eternas, parece elevarse fantásticamente hasta el cielo. 


Zeus
Sobre esta montaña magnífica e imponente se erguía el “Palacio del Rey del Cielo y de la Tierra”: Zeus (el Júpiter de la mitología Romana). En la cima más alta, en los blancos vapores de las nubes, un águila, símbolo de su poderío, volaba sin cesar.

Pero mucho antes de que se extendiera sobre el mundo el reino de Zeus y de que se levantara en la cumbre del Olimpo su mansión inaccesible para los mortales, con sus torres y sus murallas doradas; otros dioses habían gobernado seres y cosas. Era Cronos, el inexorable dios del Tiempo, a quien los romanos identificaron con Saturno.

Cronos
Cronos, quien era hijo de Urano (el Cielo), sabía que el destino lo había condenado a ser destronado por uno de sus hijos varones. Por esta razón se apresuraba a devorarse a todos los hijos del sexo masculino que tenía con su esposa Rea. Ésta, cansada de verlos desaparecer uno tras otro en el estómago paterno, tuvo un día la idea de reemplazar al hijo que acababa de nacer, con un trozo de roca cuidadosamente envuelto en primorosos pañales. Cronos cayó en el engaño y Zeus pudo salvarse.

Rea entregándole su hijo a Cronos
El niño Zeus fue criado secretamente sobre el Monte Ida en la isla de Creta por coribantes y ninfas, alimentado con leche de la cabra: Amaltea (uno de sus cuernos rotos se transformó después en el “Cuerno de la Abundancia”).

Cuando Zeus  se convirtió en mayor de edad, inició su lucha liberando a su padre cautivo de los Titanes y después lo desterró del Olimpo. 

Cronos, destronado huyó, encontrando asilo en el país latino donde reinaba Juno. A ese tiempo en que Cronos vivió en Italia se le llamó la Edad de Oro.

Hera
Una de las tantas bodas de Zeus fue con Hera (Juno), diosa vengativa, con rostro de blancura deslumbrante, protectora de hogares y familias, mujer de compañía agradable pero de carácter irascible, y extremadamente celosa. 

De la unión de Zeus con Hera nació un hijo cuya fealdad produjo la indignación materna. 

Agarrándolo por un pie, Hera lo arrojó desde lo alto del Olimpo hasta la isla de Lemnos

Hefesto
En la caída, el pobre Hefesto quedo cojo por siempre. Entonces arrojado de la comunidad de los dioses se hizo herrero, estableciéndose en las islas Lípariy  bajo el volcán Etna, en el centro de Sicilia

De ese fuego que brota de esa montaña y el de la fragua de Hefesto, fue que Zeus le encargó forjar el rayo (su arma irresistible).

Los compañeros de Hefesto son los Cíclopes. Zeus pidió también a él que edificara la morada olímpica y por recompensa le concedió la mano de la más bella de todas las diosas: Afrodita (Venus romana). 


Apolo
La flamante pareja presentaba un singular contraste: el marido no podía embellecer y la mujer no podía afearse. Por eso vivían separados y era muy difícil encontrarlos juntos.

Y hablando de hermosuras, de todos los dioses el más hermoso era, sin duda alguna, Apolo (Febo). Hijo de Zeus y de Latona, había nacido, lo mismo que su hermana Diana, (Artemisa en la mitología Griega), en la isla de Delos. 


Artemisa
Desde su niñez, Apolo había mostrado su fuerza extraordinaria estrangulando con sus manos a la enorme serpiente Pitón, que se había arrastrado hasta su cuna. 

Artemisa era la pálida y fría diosa lunar de los bosques. Su mayor placer era la caza, estaba siempre acompañada por una comitiva de ninfas, y perseguía incesantemente ciervos, lobos, jabalíes.

Al tiempo y como para enredar el lazo familiar, y vengar a su hijo Asclepios (Esculapio), fulminado por su abuelo Zeus, Apolo mató a los Cíclopes forjadores del rayo. A su vez, en castigo, el padre de los dioses lo desterró, encargándole el cuidado de los rebaños de Admeto, el esposo de Alcestes.

Tiempo después, Apolo, en compañía de Poseidón (Neptuno), exilado como él, entró al servicio de Laomedonte para quien edificó las murallas de Troya. Al fin fue llamado al Cielo por su padre Zeus, quien le confió el Carro del Sol. 


Hermes
Desde ese día se lo pudo ver, con su cabellera de oro al viento, surcando el cielo de oriente a occidente en su carro arrastrado por briosos caballos.

En cuanto a Hermes (Mercurio), aparecía siempre en lugares diferentes del Universo. Era el mensajero alado de los dioses. Se lo representa con sombrero de viaje, un bastón alado en las manos (el caduceo, alrededor del cual se enroscan dos serpientes) y alas en los pies.

Y cerrando con broche de oro, la historia más sorprendente es la de Palas Atenea (Minerva), era a la vez diosa de la Guerra y diosa de la Sabiduría. Su nacimiento se produjo en circunstancias extrañas. 

El padre de los dioses (Zeus), despertó un día con violentos dolores de cabeza, que le arrancaban gritos de dolor. 

Atenea
Tomó todos los remedios de los cuales podían disponer entonces los dioses. Más todo fue en vano. 

Decidió, pues, ir hasta la fragua de Hefesto y le exigió que le partiera el cráneo con un hacha. Este, obediente al pedido paterno lo hizo, y cuál no sería la sorpresa general al ver surgir de la cabeza divina una maravillosa criatura, cuyos primeros actos no fueron los gritos clásicos de los recién nacidos, ni el pedir vino como Gargantúa, sino que empezó a discutir problemas filosóficos con las otras divinidades que habían asistido a ese fantástico nacimiento. 

Después del hachazo, el cráneo paterno se cerró como por arte de magia. Increíble, no?

Grísseld LecunaGarcía/Bavaresco
http://historiaybiografias.com/dioses_olimpo/
mitosyleyendascr.com/mitologia-griega/grecia27/

https://es.wikipedia.org/wiki/Zeus


No hay comentarios:

Publicar un comentario