Leyendo en uno de los tantos grupos del Facebook, a
los que soy miembro, encontré un artículo que me dejo con sentimientos algo extraños
(una mezcla de asombro, repulsión, terror y hasta risas), el grupo se llama ARQUEOLOGÍA,
CIVILIZACIONES ANTIGUAS Y MISTERIOS DE LA TIERRA. Este grupo es
para los amantes de la
Arqueología, donde el que allí esta, va descubriendo historia de las civilizaciones Antiguas, y los misterios
que se descubren o investigan a lo largo de los tiempos.
En ese grupo he conseguido (y descubierto) cosas en las cuales jamás
creería que existían en este mundo y menos que le sucederían al ser humano.
Por ello quise
compartir con mis lectores amigos este interesante artículo.
El tema habla de una tribu que está ubicada en la zona
limítrofe entre Somalia y Kenia, en África.
Se hacen llamar BUBAL,
y poseen la particularidad de arrastrar entre sus piernas unos testículos descomunales.
La explicación,
dice el blog de dónde sacaron el artículo, es todavía más inquietante que el resultado,
ya que desde pequeños los niños Bubal,
ingieren el flujo vaginal de las vacas y lo hacen hasta que se casan,
pues dicen que al adquirir dicho hábito de chupar la vagina de las vacas, poseerán
una fuente de valentía y fortaleza, según ellos.
Además a los niños se les da de comer, entre otras cosas, el flujo menstrual de las propias vacas, algo que hacen en forma asidua hasta que llegan a la adolescencia, cuando deciden casarse.
Debido a esta dieta alimenticia, se libran de padecer de anemia,
ya que ese líquido menstrual es rico en vitaminas B6, B12, vitaminas E y D.
Sin embargo la ingestión de hormonas les lleva a, pasada la adolescencia, experimentar un aumento en el tamaño de sus testícuos, que llegan a alcanzar un diámetro de hasta 80 cms.
Algunos investigadores aseguran que se trata de casos de elefantiasis escrotal, y seguramente no
les falta razón.
Las imágenes llegan a ser impactantes, porque puede observarse
como la gran delgadez de las personas contrasta con unos testículos gigantescos.
Esta deformidad física no les representa ningún problema en
cuanto al hecho de la reproducción, aunque le conllevan a otros problemas que
saltan a la vista y lo dejo a su imaginación.
Aunque los Bubal
han sabido aprovechar su condición para beneficio propio ya que algunos turistas
suelen pagarles grandes cantidades por ver sus testículos, y ellos utilizan
estos ingresos para mejorar la calidad de vida de la nación tribal.
Es increíble lo que uno puede encontrar
navegando por el internet; en un escrito de Clemente Balladares en el blog Venezuela y su historia, conseguí a un personaje, nacido en Aroa, Estado Yaracuy y que perteneció
al Batallón 182 de la
División 23 del Ejército norteamericano, mejor conocida como AmeriCal. Pero
entremos a su vida y descubramos algo que ni yo sabia de este héroe venezolano.
Manuel Antonio Prince Veroes nació en Aroa, estado Yaracuy, el 16 de
junio de 1914. Su madre Carolina Veroes,
nativa de San Juan de Los Cayos y su padre de origen holandés (John Prince), quien vino por la
instalación del ferrocarril Bolívar. De niño se crió en Barquisimeto estudiando
en el Colegio La Salle.
Toño, como le decían, cuando cumplió los 13 años de edad se
fue a vivir a Nueva York con un
hermano mayor que lo invitó. Su partida también fue por las creencias de su
madre sobre la dictadura gomecista, parte de su educación Lasallista y como el
mismo asevera en las pocas entrevistas que dio al final de su vida diciendo:
“la democracia es algo donde vivir y para defender”.
En Aroa quedarían su padre, su madre, sus hermana Carolina Guillermina y Flor Elena, mi tía abuela política, ella estaba casada con el hermano de mí Abuela
Delia, su nombre: Pablo María
Bavaresco Tescari.
En la gran manzana, Manuel Antonio aprendió primero el idioma,
posteriormente algo de mecánica en Detroit para así luego reparar los famosos
taxis Yellow Cabs y hasta
llego a ser gerente de un estacionamiento cuyo dueño recuerda era libanés. Por
allá entre finales de los años veinte y los treinta Manuel tenía un amplio
grupo de amigos latinoamericanos, mayormente Puertorriqueños y mexicanos. El 7
de diciembre de 1941 su vida cambio, Estados Unidos le declaraba la guerra al
Imperio del Sol Naciente luego de ser atacado por esta nación en Pearl Harbour.
Manuel Antonio, como sus amigos hispanos, fue
enrolado según la ley que obligaba a residentes con más de tres años a luchar
por ese país. Igualmente sus convicciones sobre esa nación no eran objeto de
evadir esa orden sino más bien motivo de orgullo y aventura. A inicios de 1942
se entrenó por tres meses en un campo militar en Carolina del Sur, luego fue enviado en tren junto a miles de
conscriptos a San Francisco donde
embarcaría al Pacífico. Aunque el ya sabía iría a luchar contra los japoneses
ya que le dieron el uniforme caqui de algodón y no de lana para el frio frente
europeo.
Prince y su unidad
fue activada en Nueva Caledonia en
mayo de 1942, se reconocía por su blasón azul con las estrellas de la cruz del
sur y cuando entro Manuel estaba formada principalmente por latinos. A finales
de ese año tomo el largo viaje en los barcos de transporte de las US Navy hacia las islas que ocupaba Japón.Fue en
octubre de ese año cuando entró al combate real en Guadalcanal en la desembocadura del río Matanikau. Prince contaba los 28 años y a su división se les ordeno
bajar en la segunda oleada. Cuando subió la playa vio la mayoría de los cadáveres
de los marines sobre la arena y otros flotando en la orilla.
El refuerzo que
dio su regimiento a los marines les permitió a los estadounidenses tomar el
monte Austen en enero de 1943 y consolidar el Campo Henderson que era la base
aérea para los primeros ataques contra Japón.
Pronto sus compañeros latinos lo
bautizaron “el brujo” por la manera en que se metía en el combate evitando la
muerte pero enfrentando sin amilanarse contra los japoneses. Su frase de cuidado era: “Las balas no son de
algodón”. Al año siguiente fue ascendido a sargento donde comandó una escuadra
de soldados más jóvenes, todos estadounidenses, sin latinos. Su arma principal
eran los morteros de 81mm para apoyo avanzado.
Cuando Guadalcanal fue asegurada el General MacArthur desembarcó y entre
los soldados a recibirlo estuvo este venezolano, al famoso general le llamó la
atención su aspecto hispano y le preguntó de donde era: con lo que Manuel
contesto para no confundir la ubicación de su pequeño pueblo yaracuyano, dijo:
– ¡Caracas! En perfecto español el
general replicó: -¡Oh, sí Caracas! Invitándolo de seguido a departir un rato en
su tienda de campaña. Al ser bajito y moreno, los aborígenes le tomaron afecto
como pensando era uno de ellos mismo, esto le logró otras atenciones. También
era uno de los más corteses con los niños locales al regalarles golosinas y
cantar canciones infantiles.
Manuel, sentado, el segundo de izquierda a derecha
Luego de Guadalcanal fue a Fidji en marzo, hasta
alcanzar Bouganville en 1944 y cuando llegaron a Filipinas el último año de la
guerra estuvo en las Islas Corregidor. Allí le sucedió su más grande hazaña
cuando en las colinas cercanas a la ciudad de Cebú el 3 de abril de 1945, un
grupo de seis americanos estaban siendo avasallados por los japoneses. Manuel
vió desde lejos el peligro de sus compañeros y dirigió fuego de mortero contra
el enemigo más una nube de humo verde que oculto a los americanos bajo ataque.
Esto encegueció a los japoneses y permitió la evacuación de sus compatriotas
incluyendo heridos.
Lo más dramático de todo era que había francotiradores
nipones y sus acciones evitaron la precisión de esos tiradores. Esa acción le
valió un reconocimiento escrito con sello del ejército estadounidense firmado
por el general mayor de la División, una cinta y medalla para su uniforme de
gala por combate destacado.
Ya para la invasión de Okinawa en julio de
1945, se perfilaba la derrota del Imperio Nipón solo que esa era la
primera Isla en territorio directamente Japonés y la defensa sería más
enconada. Sin embargo el batallón Americal continúo acabando con esos focos de
resistencia. A principios de agosto termino la guerra con la rendición del
enemigo y Manuel fue enviado a casa. En noviembre le dieron de baja honrosa y
en Nueva York sus familiares y amigos le dieron un gran recibimiento.
Para 1946 decidió regresar a Venezuela, donde monto un
negocio de reparación de autos en Barquisimeto. El periódico local El
Impulso titulo con su regreso el 27 de noviembre, posteriormente otros
diarios locales lo reseñaron en los 90s. En esa ciudad se casó y tuvo seis
hijos. Vivió bajo sus principios de respeto a los demás y defensa de la
democracia, los cuales destacaba en las conversaciones. Criticó ampliamente los
ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en una de sus últimas
entrevistas. Casi a sus 80 años logro una pensión del gobierno norteamericano
hasta su muerte el 25 de Octubre de 2003 en
Barquisimeto, Estado Lara.
Quien no quiere conocer a
Paris?, por lo menos yo si; para mi siempre fue un anhelo … de tanto desearlo,
se hizo realidad: y allí estaba yo, pronta a pisar la tierra parisina en el otoño
del 2015, fascinada pues, París se arrodillaría ante mi, como dice una de
las canciones de Sandro.
Pero no fue como hubiese
deseado conocerla, fue toda una tragi-comedia.
Pasillos del Aeropuerto Fiumicino, Roma
Venía de un vuelo de Italia procedente de Turquía, allí comenzó todo. Un vuelo que se retrasó, en donde se
extraviaron algunas maletas, yo tenía pasaje pero mi compañero de viajes, no.
Fue una pesadilla el estar casi un día en el aeropuerto de Fiumicino, corriendolo de un lado para el otro.
Italia querida de mis
ancestros; no pude conocerte bien, el día que tenía para conocer a Roma, la
pase por los pasillos del aeropuerto, solo pude con una pequeña escapada, ver de lejos el coliseo, otro día
con más calma te visitare.
Por lo menos me comí una verdadera pizza italiana
Al fin todo se arregló, conseguimos las maletas, el vuelo
para irnos ya y no para mañana, todo listo menos el día perdido, en fin, Francia allá vamos.
Oh la la!!! Paris nocturna,
contenta pero súper agotada, llegamos al aeropuerto Charles de Gaulle ya centrada
la noche, yo solo quería dormir.
El solisimo metro del aeropuerto Charles de Gaulle
El aeropuerto estaba súper solo, ni siquiera
nos sellaron la entrada, creo recordar que ni pidieron el pasaporte, aunque sea
para ver la foto, nada..
Teníamos que hacer las
cosas rápido pues ellos a las 11 pm cerraban el acceso al metro y no nos quedó
de otra que montarnos y tomar el hotel allí mismo en el aeropuerto…
La luna parisina dándome la bienvenida
Una vez que bajamos del metro salimos a la zona de los
hoteles y el frío estaba dándonos la bienvenida, era abrazadoramente helado y allí
estaba la luna esplendorosa, redonda y luminosa….. Llegamos al hotel, esperamos media
hora en la recepción, y al fin la habitación frente a mi; me eche un baño y no supe de mi hasta la mañana
siguiente.
Catedral de Nuestra Señora de Notre-Dame
No sé qué hora era, pero
me despertó mi compañero casi que me tumba la puerta, tenía que apurarme a
desayunar ya que iríamos a conocer el centro de parís y sus monumentos…. Y más rápido que inmediatamente estaba yo allí,
feliz y contenta…
Alex, mi compañero de
viaje ya había ido a hablar con un guía que le dió todas las instrucciones de
cómo llegar a la Torre Eiffel, al Arco de Triunfo, al Museo de Louvre, a la Catedral de Notre Dame, en fin, con mapa y
todo listo para iniciar el tour..
Canales del Sena
Después de un desayuno
full, nos dirigimos hacia el metro para llegar a la estación de Saint Michel – Notre
Dame. Saliendo de la estación nos
enrumbamos hacia la Ile de la Cité
(Isla de la ciudad), donde se encuentra la Catedral de Nuestra Señora de
Notre-Dame. Que majestuosa. Nos paramos en el puente Pont au Change. Les tomé unas fotos de lejos a
la catedral y una a la Conciergerie (Palacio de Justicia), y unas donde salgo
yo....¡Que emoción!
En el Pont au change
Al acercarnos me doy cuenta que mi celular está bajo en baterías, Oh! No, lo que me faltaba.
No pude tomarme una foto
junto a la catedral, pero si pude detallarla y disfrutarla al igual que la
estatua ecuestre ubicada a un lado de la iglesia, aunque no se de quien se
trataba pero me pareció hermosa e imponente. Recorrimos la isla y admire su arquitectura, pero con tristeza de no poder llevarlas en una foto.
Conciergerie (Palacio de Justicia)
Continuamos el tour con un
excelente sol y el frió estaba subiendo. Próxima parada: la Torre Eiffel. Nos montamos
en la línea Nº 9, estación "Trocadero".Una vez dentro esperando llegar,
una chica nos deleitaba con su música tocando el violín, y una vez que terminó, comenzó
a pasar por todo el tren recogiendo dinero, yo no tenía sencillo y solo le di
mi mejor sonrisa por lo bien que nos hizo el viaje, pero no me la devolvió, quería
dinero.
La Torre Eiffel y el rio Sena
Lo impresionante una vez que
llegamos y que te ponen los pelos de punta es, cuando vas subiendo (saliendo
del metro), y miras al frente, vas viendo como poco a poco la Torre Eiffel va
apareciendo insinuantemente, mientras vas subiendo los escalones. Wow!! Que
increíble allí estaba ella, imponente dándome la bienvenida.
Llegamos al 7° distrito y nos
enrumbamos hacia el champs de Mars o Campos de Marte. Mientras más nos
acercábamos más latía mi corazón. Hermosa al fin te conocía en persona.
La Torre Eiffel y Yo
Prendí
mi celular y tome unas cuantas fotos junto a ella, junto al Sena, junto a mi
compañero, pero no podía hacer vídeo, pero estaba emocionada y no me importaba más
nada, se había cumplido mi deseo. Camine por el borde del Sena, por una
plazoleta debajo del puente nuevo y allí siempre estaba la torre vigilándonos.
Ahora quería ir hacia el Arco
de Triunfo y ver plasmado el nombre del único latinoamericano, héroe insigne de
las revoluciones: francesa, de Estados Unidos y sudamericana, el venezolanoFrancisco de Miranda, nacido en
Caracas, Venezuela el 28 de marzo de 1750, me encanta y me llena de orgullo
decirlo.
Metro de Paris Estación de Saint-Michel - Notre-Dame
Leí que Napoleón Bonaparte en alguna ocasión, refiriéndose a él, dijo:
«Es un Quijote que no está loco, tiene fuego sagrado en el alma».
De regreso tomamos el metro, y Alex mi compañero, se paraba a
leer cualquier notificación que había para saber hacia dónde dirigirnos. Cuando
llego el metro, este abrió sus puertas y yo entre pero Alex se quedó leyendo un
cartel, le llamo y no me hace caso; al rato suena el timbre que señala que
dentro de algunos segundos las compuertas se cerraran, y este no se inmuta.
Algo parecido quedo mi bolso atrapado
Pues yo decido salir, pero en eso se cierran las puertas y mi
bolso queda atrapado entre las fauces del metro: yo adentro y mi bolso afuera
todo estripado, a lo que pego un grito: ¡Mi bolsoooo!, pero nadie dice nada, ¿no
me escuchan?, volteo para que alguien me ayude, y nada…repito esta vez más fuerte: ¡MI BOLSOOO!!! y de la nada salió un chico joven con pinta de Nigeriano, y cual Superman, con sus fuertes brazos abrió las puertas y al hacerlo apareció mi bolso y el primer rostro que vi en la puerta de afuera fue el de mi compañero, con cara de: ¿Porque lo hiciste?, - pero ¿Que hice?, si la culpa es tuya..-
La Rue Scribe
En fin, le dimos las gracias al chico que desde luego tampoco se inmuto, dio media vuelta y regreso a su sitio.. Yo quería llorar, que pena todos los franceses y no franceses me veían como gallina que mira sal... algo así como: ¿De donde habrá salido esta campurusa?.
Llegamos a una estación que ni se cuál era, yo andaba
apenada.
El teatro de la opera Garnier con unos de los andamios
Algunos se bajaron, otras persona subieron, al rato el timbre, se cierran
las puertas, pero no lo hace completo y luego las vuelve a abrir, y así estuvo
como con dos intentos más… ¿Qué pasaba? Y sale una voz por el parlante diciendo
que por fallas en el cerrado de la puerta, el tren no podrá avanzar así que
debíamos de tomar otro metro… Dios mio!!!! Había dañado las puertas del metro; ya ni les
quería ver las caras a nadie ni a mi compañero que se burlaba de mi muerto de
risa, quería matarlo, pero no lo hice…
Teatro de la Opera de Garnier
Salimos hacia el andén, y estábamos como la familia Robinson buscando a Alfa Centaury: Perdidísimos. Subíamos y bajábamos las escaleras, seguíamos a la gente cual borregos tras su madre, en fin, decidimos salir a la superficie y buscar un bus o un taxi..... Tomamos la Rue Scribe para esperar un autobús, y nada.
El Teatro de la Opera y el Grand Hotel
Decidimos caminar un poquito hacia la Rue Auber y esperar el autobús que nos llevaría al aeropuerto. Y como para que se me quitara la tristeza, allí frente a mi estaba el majestuoso Teatro de la Opera Garnier, increíblemente bello, aunque no lo pude admirar bien pues le hacían mantenimiento y tenía algunos andamios que impedían verlo en todo su esplendor. Estaría
el fantasma por allí..??
El avión que nos llevaría a Bilbao
Tuvimos que regresar al hotel pues ya era un poco tarde y
estábamos más que cansados, pero a pesar de no haber conocido el Arco, los
campos Elíseos, el Louvre, entre otras, me sentía satisfecha, pues había conocido la Torre, la Catedral, el Sena y la hermosa luna que me había dado la bienvenida…
Pero eso sí, con la promesa que para la próxima estaré más
pendiente de mi bolso, de la cámara, de mi celular (con la batería full) y de mi
compañero de viaje…
Sin muchas fotos que apreciar y presumir, pero super bendecida
por este inolvidable viaje que me hizo conocer a la bella París.
La canción «Gracias a la vida» ha asomado como una de las
contradicciones más grandes de la compositora: Violeta Parra; resulta paradójico que la autora de un himno de amor
por la existencia, se suicidara un año después de escribirla.
Algunos críticos de su obra perciben en la letra, en el estilo de musicalización, en los tonos usados y en la monotonía de sus temas, el reflejo de un estado de ánimo depresivo y una canción de despedida.
Esta canción también esconsiderada de manera instantánea un “himno humanista”, un aleluya a los dones que nos consiente la genética
biológica: la vista, el sonido, el lenguaje, la marcha, el corazón, la risa y el
llanto.
En las siete estrofas de la canción, se dedica a agradecer la
existencia por las diversas bendiciones que ha recibido. Cada estrofa comienza
con el motivo que impulsa la canción «Gracias a la vida que me ha dado tanto».
La última estrofa es la única que cuenta con seis versos y es abierta y cerrada
por el verso principal de la canción.
Violeta y su padre Nicanor Parra
Violeta
del Carmen Parra Sandoval, nació un 04 de Octubre de 1917 en San
Carlos, región de Chillán, al sur de Chile. Fue
una cantautora, pintora, escultora, bordadora y ceramistachilena, considerada una de las principalesfolcloristasenAméricay gran
divulgadora de lamúsica popularde
su país, a la que enriqueció con su obra.
Con su hija Isabel
Hija
del profesor de música Nicanor Parra Parra y de la campesina Clarisa Sandoval
Navarrete, Violeta tuvo cinco hermanos y dos medio hermanos.
Desde pequeña se
inició en el canto y en 1942 obtuvo el primer lugar en un concurso organizado
en el Teatro Baquedano.
Viajó por todo el país y estuvo en contacto con la
realidad social. Asumió la izquierda como postura política y se dedicó a
indagar en las raíces de la música popular.
Con su hijo Angel
Procreo
4 hijos; Isabel (Violeta Isabel
Cereceda Parra) y Ángel (Luis Ángel Cereceda Parra), frutos de su matrimonio
con Luis
Cereceda. Esta unión no tardó en presentar inconvenientes, dado el carácter
inquieto y lleno de distracciones de Violeta.
Luis Arce
Y de su segundo matrimonio con Luis Arce, tuvo a Carmen
Luisa Arce Parra y Rosa Clara
Arce Parra, quien fallecería a muy corta edad.
Violeta viajó por
varios países de Europa en la década de los 50 y a su regreso pasó por Francia
donde grabó temas del folclore de Chile para el sello musical Le Chant Du
Monde.
Violeta y Gilbert Favre
En 1956 la designaron
directora del museo de Arte Popular de la Universidad de Concepción. En
1964 organizó una exposición individual sobre su obra plástica en el Museo del
Louvre (París).
Durante la época de los 60’s, conoció al gran amor de su vida,
el antropólogo y musicólogo suizo Gilbert
Favre, con quien vivió en Ginebra, pero también se convirtió en
el destinatario de sus más importantes composiciones de amor y desamor:Corazón maldito; El gavilán,
gavilán; Qué he sacado con quererte; y por supuesto “Gracias a la vida”, entre otras.
Regresa al país sola pues Gilbert no lo hace, dejándola por consiguiente.
Ella se encuentra con un Chile diferente, está confundida y descubre que su
hija Rosita Clara ha muerto y nació su primera nieta. Le dedica varios cantos a
su hija y expresa el profundísimo sentimiento de culpa por haberla
abandonado. Este es uno de los factores que
la habrían llevado a darle a este libro una faceta depresiva y, posteriormente,
al suicidio.
Estatua de Violeta Parra en su San Carlos natal.
En Bolivia,
Favre conoce a IndianaReque Terán, con quien se casa. Violeta en Chile
ignoraba su matrimonio; en 1966 viaja para reencontrarse con él, y lo encuentra casado. Se presume que esa es otra
de las tantas noticias que sumió a Violeta en ladepresión y que provocaría su suicidio al año siguiente.
Su vida estuvo caracterizada por el sufrimiento y el dolor de distintos
factores, tales como los constantes engaños de los hombres en su vida. Por otro
lado, toda su vida estuvo repleta de muertes, comenzando con su hermano Polito,
que también causó una depresión en su madre,
más la muerte por tuberculosis de su padre quien tenía un grave alcoholismo.
El final de una gran artista
El 5 de febrero de 1967, enSantiago
de Chile, sola y ahogada por la depresión, a sólo unos meses después de grabar la
colección de canciones titulada “Las últimas
composiciones”, donde esta “Gracias a la vida”, ella se encierra en su carpa y, al filo de las
seis de la tarde, se dispara un tiro mortal en la sien derecha.
Cartel de la película basada en el libro de su hijo Angel Parra
Tenía cuarenta
y nueve años. Algunos aseguran que fue víctima de una
profunda depresión y que además, influyeron factores económicos.
La muerte de Violeta sorprendió
a su familia y al mundo. Jamás imaginaron que se
suicidaría.
“Me falta algo, no sé qué es. Lo
busco y no lo encuentro. Seguramente no lo hallaré jamás”, manifestó Violeta
a un periodista luego del lanzamiento de su último disco.
Las razones tal vez
nunca se sepan, pero su legado artístico permanecerá por siempre.