domingo, 8 de octubre de 2017

COSAS SENCILLAS PERO IMPORTANTES QUE ACONTECIERON DURANTE LA BONANZA DEL FERROCARRIL Y LAS MINAS DE AROA

Queriendo informarme de la inmigración italiana en Venezuela por allá por finales del siglo XIX, me introduje en el fascinante mundo cibernético, ya que en los libros que tengo a la mano no me contaban mucho. Entonces, el internet me arrojó hacia un montón de artículos, tales como; que la mayoría de los italianos emigraron a Venezuela luego de la Segunda Guerra Mundial. 

Entre los años cuarenta y cincuenta casi 300.000 italianos entraron por el puerto de La Guaira, creando la mayor "colonia" europea en Venezuela. Inicialmente muchos fueron enviados a las comunidades agrícolas (como la "Colonia Turénen el estado Portuguesa), pero la mayoría terminó trabajando en el comercio, industrias y servicios de las principales ciudades venezolanas.

Si tomo otro artículo habla desde Colon, Codazzi, Isnardi y Castelli. Y comentan que antes de 1850 son parte de una migración política, y que a partir de 1870, la migración es principalmente por razones económicas. Son los que, abrumados por los impuestos excesivos que debió cobrar la “Destra Storica” y por la decisión gubernamental de suprimir el subsidio a la pobreza, no les queda otro remedio que buscar nuevos horizontes en tierra extraña. Aparte de la inmigración espontánea que se sucede casi ininterrumpidamente durante las primeras tres décadas del siglo XX, y prosigue la historia hasta nuestros días.

Inaugurando una estacion el presidente Antonio Guzmán
Blanco junto 
a una comitiva de embajadores del Reino
Unido, Ministros 
y los comerciantes Blohm y Boulton.
Puerto Cabello 7 de febrero de 1877
Lo que me preocupa e incomoda es que siendo la época del ferrocarril y las Minas de cobre en Aroa en el Estado Yaracuy tan importante para la nación, no se conozca bien su historia, por lo menos en la internet existe muy poca (por no decir nada), información de los inmigrantes que trabajaron en esa zona y en esa época; tampoco encontré de cómo se formaron las cinco colonias que sustentaron con su trabajo productivo la bonanza económica de la época, tales como; la Colonia Inglesa, la Italiana, la Holandesa, la Alemana y la Árabe. Solo se sabe que esas minas pertenecieron al Libertador Simón Bolívar y al fallecer su hermana las vendió.

Talleres del Ferrocarril
Pero esa parte de la historia tan importante de Venezuela, casi se desconoce. Muy poco se ha escrito sobre ello, o por lo menos no lo han colgado en la red.

Cosas como, el no saber que  la compañía explotadora de las minas tenía fuentes (plantas), de energía eléctrica, la primera en Latinoamérica.

Que el cobre, ese mineral yaracuyano que fortaleció a la industria metalúrgica británica, en el momento histórico en que Inglaterra se colocaba como gran potencia en el marco del Capitalismo Monopolista Imperialista, se caracterizaba por ser superior en calidad a otros cobres del mundo incluyendo a los de Suecia y Chile.

Deposito de dinamita
Este repunte económico y la necesidad de mano de obra para el trabajo en los talleres del ferrocarril y de la explotación de las Minas, que fue la que estimuló las migraciones de grupos extranjeros, quienes se asentaron en el valle de Aroa y es esa misma mano de obra extranjera la que conllevó a la construcción de Pueblo Nuevo o Aroa como hoy en día se le conoce.

El que la nueva generación venezolana no tenga en cuenta que ese cobre, sacado de las entrañas de Aroa, fue utilizado para construir entre otros monumentos, la Estatua de la Libertad de Nueva York (el 85% del material utilizado) y la Torre Eiffel de París (con el 35% del material yaracuyano).

Es de importancia conocer también, que a finales del siglo XIX, en el lapso 1878-1888, cuando llegaron mis ancestros y otros tantos inmigrantes, solo se tomaba en cuenta la inmigración vasca y canaria, no porque eran mejores trabajadores o más fuertes, era solo por razón del idioma así había más facilidad de incorporarse a los trabajos y a la vida en la nueva tierra; esto quiere decir que los demás entraron al país y no fueron censados (sobre todo los que llegaron por Puerto Cabello), es por ello que no existe documentación que conste su existencia en esta tierra. 

Giuseppe Bavaresco De Windt
Tal es el caso de mi bisabuelo Giuseppe Bavaresco De Windt (José), en los expedientes custodiados de los archivos históricos de la Cancillería de la República Bolivariana de Venezuela, no se encuentra ninguna persona con ese nombre y que haya llegado al país, por lo tanto Don Pepe (como lo llamaban en el pueblo), no existía, ya que no portaba cédula consular y para esa época no había comenzado el proceso de las cédulas actuales. 

Por ello, en sus casi 45 años que vivió en Venezuela, jamás salió de Aroa.

Fabrica de las Minas de Cobre
Acoto que, el bisabuelo jamás quiso regresar a Italia, nunca estuvo dominado por la nostalgia hacia su patria de origen, sino que, agradecido, fundió su destino al de este país mientras veía a Italia con afectuosa cercanía y admiración.

Para comienzos del siglo XX cuando comenzó a llegar una gran cantidad de nuevos habitantes provenientes de otras latitudes, entre ellas la italiana, las leyes que daban prioridad a la inmigración vasca y canaria perdieron vigencia dando paso por igual a toda gente proveniente de cualquier parte del mundo.

Yo, en la Plaza San Miguel
Arcángel de Aroa
Finalizo destacando que Aroa, con sus Minas de Cobre y su ferrocarril (el primero de América del Sur), fue la primera ciudad en donde se vivió la verdadera revolución industrial con los adelantos tecnológicos que allí llegaron: planta hidroeléctrica, telégrafo, planta de hielo, teleférico, la primera comunicación telefónica, la primera proyección cinematográfica, y se dice que fue también el primer lugar en Venezuela donde se celebraron torneos de tenis y béisbol; todo ello promovido por los trabajadores de la compañía Wood Mackenzie.

Grisseld LecunaGarcía/Bavaresco


Fuentes:

Crónicas de Aroa en su bicentenario. Tirado Reyes, Carlos

Contribución a la historia económica de las minas de Aroa. Velery, Carlos y Surga, Jose.

1 comentario:

  1. Excelente el trabajo que estás haciendo para difundir esas historias olvidadas, que hoy día a nadie parecen interesarle. Pero es u7n maravilloso trabajo el que haces, y te felicito por ello. También mis padres vinieron a este país, después de la guerra civil española y yo, la verdad, muy poco sé sobre ese viaje. Era muy pequeña, y llegamos por La Guaira a Caracas.Lo que si medianamente recuerdo es el atentado a Delgado Chalbaud, porque se lo escuché comentar a mis padres. Parece que había sucedido recientemente.

    ResponderEliminar