domingo, 30 de julio de 2023

ALGO MAS QUE UN SIMPLE CEMENTERIO

 

La tipología de las cruces, la forma de las tumbas, las esculturas y los apellidos de los difuntos son las pistas para descifrar el origen y la religión de los que yacen enterrados en el Cementerio de la Paz, o de los protestantes o de los  alemanes. 

Es así como el nombre de Joseph Capriles (nacido en Curaçao), fallecido y enterrado en Puerto Cabello en 1883 y siendo el primer Capriles llegado a esta tierra porteña, no permite dudas de su raíz judía (otros Capriles enterrados también en este camposanto como Benjamín, Isaac, Rebecca, Raquel, Elvira, Bethsabe; nombres judíos). Y no solo por los nombres se pueden descifrar, existe también otras formas de dilucidar su origen.

Desde tiempos remotos los judíos tenían una tradición donde ellos no colocaban flores sino piedras. La razón de porque una piedra y no una flor como la mayoría de la gente, es que justamente la piedra tiene la particularidad de ser una creación muy antigua y de vida muy larga, podríamos llegar a decir que la piedra es "eterna" en cierto modo, esto refleja un poco la visión del judaísmo frente a la muerte, cuando ellos la enfrentan, saben que el alma sigue existiendo y lo único que muere es el cuerpo, pues el alma es eterna, en cambio la flor tiene corta vida y rápidamente se marchita demostrando justamente la fragilidad del cuerpo.

Con el tiempo sus tumbas empezaron a construirse con cemento elaborándole forma de piedras. Aquí podemos  encontrar muchas tumbas con ese aspecto, para nombrar algunos, está el panteón de los Gramcko, de los Stürup, los Acosta, entre tantos otros. Es de hacer notar que algunas de estas familias, a medida que fueron mezclándose con los nativos de la región, fueron bautizando a los nuevos integrantes y convirtiéndolos en católicos. Esto me recuerda una frase que les decía don Eduardo Römer Stürup a sus hijos: - Ustedes son criollos de materia prima importada. –

En mis tantas revisiones pude encontrar dos tumbas donde se aprecia la simbología de la masonería (la escuadra y el compás). Esta corriente filosófica predominaba en el país a finales del siglo XIX e inicios del siglo XX, por lo que no solo era un camposanto para protestantes y judíos, también lo era para los masones y tiempo después, para los Católicos.

En cuanto a los protestantes, sabemos que la gran mayoría de los alemanes y sus vecinos que llegaron a esta tierra profesaban el protestantismo. No todos pero si la gran mayoría, utilizaban para sus tumbas el mármol, sobre todo el de carrara. .

En este cementerio pienso que existieron alrededor de 350 tumbas y he notado en las que he investigado hasta ahora (272 de las cuales 30 están sin nombres), que existieron personas de distintos orígenes tales como Alemanes, Curazoleños, Ingleses, italianos, irlandeses, norteamericanos, holandeses, polacos, daneses, palestinos y hasta venezolanos. 

Algunos de estos seres difuntos vivían en Puerto Cabello, otros eran extranjeros que llegaban al país aunque fuera por un momento y, por enfermedades diferentes como fiebre amarilla, malaria y problemas cerebrales, accidentes o suicidios, morían y eran enterrados aquí, así vemos a marinos como Joseph Gibson, Maestre del bergantín “Magician of Liverpool”, que murió de fiebre amarilla a los 29 años. O como Archer Welch tripulante de otro bergantín inglés, quien fallece a los 20 años (era nativo de Swansea, Inglaterra). A George Hale originario de Boston, Estados Unidos. Entre tantos otros. 

Como he explicado en anteriores artículos sobre esta necrópolis, los extranjeros con una religión diferente a la católica no se les permitían la sepultura en los cementerios locales, que para ese entonces eran administrados por la Iglesia Católica, por lo que un grupo de habitantes de la zona del pueblo de San Esteban, en su mayoría alemanes protestantes, se reunieron en 1840 y adquirieron esos terrenos que antes pertenecían al Sr. Carlos A. Geller (Karl Alfred Geller), en las afueras del pueblo y quien los cedió para que se realizara este sagrado lugar que según, se terminó de construir en 1844. 

Esta necrópolis no está en uso funerario, según mis revisiones, la última persona enterrada hasta los momentos (Julio 2023), fue Constanza Lucrecia Römer Römer de Möller, en 2011. Y el primer cuerpo enterrado perteneció a Hendrick Gerardus (Henrique Geraldo), van Baalen Schaardenburg en 1850;  aunque existen otras tumbas que por sus aspectos denotan que son de datas pasadas (quizás de años 45 o 48), pero lamentablemente sus lápidas han desaparecido con el tiempo o quizás hayan sido robadas quedando solo el montículo de tierra rodeada de algo de cemento y monte. 

Pienso (y me gustaría), una vez que haya sido recuperado este cementerio (restauración de las esculturas y mejorar el ornato del lugar), pudiera muy bien realizarse visitas guiadas en las que se admire la calidad del arte fúnebre de los monumentos y se dé a conocer la historia de algunos de los personajes allí sepultados; personas nacidas en nuestro terruño y fuera de él, que fueron importantes, que lograron con esfuerzos que Puerto Cabello fuera una zona pujante económicamente gracias a las empresas que se iniciaron aquí y luego se esparcieron por toda Venezuela y parte del mundo. Existen personajes como el co-fundador de la Compañía Boulton (Richard Kolster); la hermana y también la sobrina del escritor Juan Antonio Pérez Bonalde (Adela Pérez Bonalde de Meir y Adela Meir Pérez de Gramcko cuyo esposo, también enterrado allí - Carlos Henrique Gramcko Behrens-, quien fuera vice cónsul de Dinamarca e Italia); el Doctor Adolfo Lacombe; los padres, abuelos y parte de la familia de dos de los gobernadores del estado Carabobo como son Henrique Salas Römer  y Henrique Fernando Salas Feo. 

Además, parte de las familias que iniciaron la gran empresa jabón Castilla que luego se convertiría en jabón Las Llaves (Los Frey y los Heemsen), y uno de sus principales accionistas Lothar Vollbracht (quien fallece en Panamá peros sus restos descansan en esta necrópolis), dos de las  placas de los 7 chicos nacidos en Puerto Cabello, que fueron llamados a filas (2da guerra mundial), por tener doble nacionalidad (venezolana-alemana), mientras cursaban estudios en Alemania: Uno fallece en Grecia (Rolf Baasch Römer y el otro en Bélgica (Waldemar Römer Römer). 

La profesora de piano del colegio alemán (Anna Wittstein); así como también la administradora del albergue que funcionaba en la actual casa del General Salom (Herr Anna Franzen); el fundador de la empresa aduanera Eduardo Römer & Cia. (Eduardo Römer Stürup); personalidades que fueron presidentes y pertenecieron a la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Puerto Cabello, apellidos tales como, Römer, Ermen, Echeverría, Kolster, Salas, Capriles, Meir. 

Los padres del Doctor David Lobo; familiares del narrador deportivo Hermann “Chiquitin” Ettedgui, entre tantos otros. Y es que ese lugar es parte de nuestra identidad y es importante que reflexionemos sobre el porqué se llegó hasta el descuido. 

Y es que este recinto abarca todo: Desde el punto de vista arqueológico, educativo, de las artes, la historia de Puerto Cabello y de la Venezuela de la época; en ella se han identificado 2 obras de los escultores italianos, Julio Roversi quien diseñó el cenotafio dedicado al Generalísimo Francisco de Miranda en el Panteón Nacional. Y Emilio Gariboldi, autor de la ornamentación del Arco de la Federación del Calvario, entre otros escultores de la época. Sueño con ver materializada la restauración total de este camposanto. 

Como deben de saber los asiduos lectores de mi blog, me encanta hurgar en la historia de mi Puerto marinero y esta es una historia muy importante e interesante. Estoy tratando de descubrir y rescatar (ad-honoren) del cementerio (con la autorización de su administrador), la vida de las personas; recién estoy elaborando un catálogo de lápidas anexándoles sus fotografías y una pequeña reseña de sus vidas para hacer un inventario funerario ya que los registros del libro se extraviaron. 

Mi intención es devolverles el sentido de pertenencia a sus familiares y ojala que se permita entregar a Puerto Cabello un sitio que pueda formar parte del eje turístico del estado por esa importante carga histórica que posee. Estoy convencida que hay que devolverle la dignidad a este cementerio.

 

Grísseld LecunaG/Bavaresco

 

Fuente:

“San Esteban Camino a la Cumbre”. Asdrúbal González. 2008

“Historia y presencia de una Cámara Centenaria”. José Alfredo Sabatino Pizzolante. 1997

 “Puerto Cabello. Huellas de los primeros pasos”. Miguel Elías Dao. Impreso en Venezuela por Impresos Italgrafica, s.a.

“Los Alemanes en Puerto Cabello y San Esteban”. Lucrecia Möller y Adolfo Aristiguieta Gramcko. 1996. Fundación Ramón Días Sánchez

Paginas genealógicas: Familysearch, Ancestry, Geni, Myheritage. 

3 comentarios:

  1. ¿ sabe ud dónde sepultaron al Dr. Adolfo Prince Lara ??

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Según un artículo (tomado de la revista Punta Brava Nº 13 de junio de 1967), sobre el doctor Adolfo Prince Lara, escrito por el doctor Fabián de Jesús Díaz, miembro correspondiente a la Academia Nacional de la Historia de la Medicina, de la Sociedad venezolana, y haciendo un breve recuento de ese artículo iniciare comentando que él muere en Filadelfia, Estados Unidos el 29 de junio de 1956. Lo trasladan a Venezuela, en capilla ardiente donde instalan su féretro en el salón de sesiones de la Municipalidad. De allí el cadáver fue trasladado a su residencia. Luego lo llevan al templo de San José (hoy Catedral).

      El día 4 de julio en la mañana es llevado al cementerio del Sur (no tengo idea donde estaría ubicado dicho cementerio). Ya para 1967 y con la insistencia de su esposa doña Maria Magdalena Capodiferro de Prince Lara, trasladan sus cenizas al Cementerio de la Salina (presumo que sea el cementerio Municipal que quedaba en Tejerías, donde estaba el mercado libre, al lado del Cementerio de los protestantes.

      Como bien sabemos los porteños, ese cementerio fue trasladado a La Sorpresa frente al aeropuerto para realizar la autopista El Cangrejo en el primer mandato de Rafael Caldera (1969-1974), pero no estoy segura si sus cenizas fueron trasladadas al nuevo lugar del cementerio Municipal, pues dicho artículo fue escrito cuando aún existía el anterior camposanto.

      Eliminar
  2. Saludo, es importante conocer la historia de este municipio, Puerto Cabello tiene muchos lugares que conocer, me parece que este cementerio conozcamos su origen y se rescate para el conocimiento de nuestra y futura generaciones

    ResponderEliminar