viernes, 20 de septiembre de 2019

EL CUMPLEAÑOS FELIZ DE TODOS LOS VENEZOLANOS. SU HISTORIA REAL


En días pasados estuve chateando con uno de mis apreciados primos, él, desde Valladolid, España y yo, desde Puerto Cabello, Venezuela; así se hacen las visitas en esta época (ya sea por escrito o al propio estilo de los supersónicos de Hanna-Barbera; vía skype o whatsapp).

Y en una de esas conversaciones Luis Guillermo me contó una historia familiar, que hoy con su permiso me atrevo a comentarles pues vale la pena que se sepa, y es sobre una canción que nosotros los venezolanos escuchamos desde que estamos en la barriga de nuestra madre, no solo cuando cumplimos años, también  cuando cumplimos semanas, meses, días…. De todo o por todo sale esa canción…. Pero la historia de como se hizo, de quien se inspiró, la razón de porque fue escrita, ¿la conocemos? ¡No...! Pero gracias a mi primo, ya es hora de que el venezolano se entere.

EL CUMPLEAÑOS DE MAMÁ

Recuerdo de niño que entre los amigos había una familia a quienes mis padres querían mucho. Ellos vivían en una casa de Los Dos Caminos, en Caracas, esa familia era la de la Señora Cruz, con sus hijas y algunas nietas pequeñas. Bueno, la verdad es que no se si todas habitaban allí, pero si recuerdo la alegría que producía nuestra visita, tratándonos con muchísimo cariño, hasta el punto de que desde entonces y aunque yo no las viera, siempre preguntaba a Mamá por las Cruz.

Luis Cruz
En algunas oportunidades en aquella casa también estaban de visita unos señores que conformaban el conocido Trío Los Naipes, cuyo director era Luis Cruz, eventualmente recuerdo haber visto a conocidas y famosas cantantes como lo eran Mirla Castellanos y posteriormente a Mirtha Pérez.

Mamá me contó cuando yo era pequeño, que cuando se encontraba embarazada de mi hermana Aurora, la señora Cruz, quien era nuestra vecina en aquella urbanización que pertenecía a la Cigarrera Bigott, donde trabajaba mi viejito, mi abuelo Papayuto (Luis Augusto Radaelli Tescari), le enviaba leche de vaca recién ordeñada y siempre estaba pendiente de ella y de mi futura hermanita. También nos contaba que Luis se paseaba a caballo por esos campos y a veces me llevaba a pasear con él; que le gustaba mucho la música y componía canciones que interpretaba con su guitarra y en ocasiones grababa en discos 78 de pasta, en el centro de Caracas. Según mamá este muchacho tendría entonces como diecisiete años.

Luis Guillermo y Aurora Margarita
Siendo ya adolescente, cuando veía por televisión al Trio Los Naipes me sentía muy contento y orgulloso por conocerlos y sentir que Luis Cruz era como parte de mi familia.

Pasaron muchos años, murió la señora Cruz y con nosotros ya adultos y casados, mamá se fue distanciando de las Cruz hasta el punto de tener muy poco contacto con ellas, salvo eventuales conversaciones telefónicas.

La familia Cruz quedó en el pasado, habitando solo los recuerdos de aquella familiaridad esfumada en el tiempo. Un buen día, hace 8 años, yo llegaba al aeropuerto rumbo a Boconó, ciudad situada al Noroeste del estado Trujillo en Venezuela, a dictar unas conferencias para unos cursos en la Casa de la Cultura local. En el estacionamiento me esperaba un taxi para llevarme a la ciudad.

Mientras abordaba el auto, llamaron mi atención unos señores que, varios carros más allá, manipulaban unas guitarras. Le pregunté al taxista por ellos y me comentó que eran integrantes de Los Naipes y venían invitados a un programa de radio Boconó, llamada Noches Boconesas, que era transmitido con invitados especiales una vez al mes desde la plaza Bolívar de esa ciudad; a ellos les correspondía presentarse esa misma noche.

Llegue al hotel ya de tarde y después de organizarme, decidí irme un rato de paseo por los alrededores. En mi mente permanecían aquellos músicos.

Caminé hacia la Plaza Bolívar llena de familias con niños que paseaban en espera del espectáculo anunciado. En la tarima preparada para el programa, se encontraban los señores que había visto en el estacionamiento del aeropuerto, afinando las guitarras. Decidí acercarme para averiguar quien era Luis Cruz. Cuando pregunté me señalaron a uno de ellos que se encontraba en una esquina absorto en su guitarra. Me acerque y le dije quien era yo. Levantó la cabeza y lentamente se puso de pié. Su sorpresa fue quizás mayor que la mía, no nos conocíamos, no nos veíamos desde hacia por lo menos cuarenta año. Me dio un fuerte abrazo y solo pudo decirme: 

Luis Cruz (1930 - 2012)
- ¡Pero si estas viejo…! -

Claro, como no estarlo, la última vez que nos vimos yo tenía 15 o 20 años y ahora tenía el cabello canoso y cincuenta y cinco años encima. Con mucha rapidez me preguntó por papa; ya fallecido, mama, Aurorita mi hermana, los demás hermanos, sobrinos, nietos, en fin, poniéndonos al día con las referencias familiares. Me contó de los suyos, que vivían en San Antonio de los Altos, en Los Teques del Estado Miranda. Me preguntó y le conté sobre mi profesión, actividades y lo que venía a hacer en Boconó. Y entre comentario y comentario, me miraba con curiosidad, como incrédulo de estar conversando con un pasado que volvía en una irreconocible imagen. 

Luis Guillermo Marcano Radaelli
Me hablo de dos canciones infantiles que había compuesto para Aurora y para mi cuando éramos niños y que le había dado muchas satisfacciones y dividendos al ser sumamente populares en España y entonces invitándome a permanecer allí, dio comienzo al acto. Lo más hermoso fue que dedico la función hablando de mí y de la sorpresa de encontrarnos, y para mayor asombro, contó esta historia:

Dijo que mi Mamá Lerida Radaelli de Marcano, tenía una hermana llamada Aura Teresa Radaelli Bonaguro (Claro!!! La tía Aurita), entonces soltera y bellísima, de quien se había sentido enamorado.

Se acercaba el cumpleaños de mi Mama y se reunirían en mi casa un 2 de Enero. Él quería sorprender a la Tía Aurita y no sabiendo como, decidió componer entonces a mi mamá una canción de cumpleaños para cantársela ese día,  de allí aquello de “…los más íntimos amigos esta noche te acompañan….”

Los  Marcano Radaelli (Douglas, Guillermo,
Lerida, Aurora, Evelyn y Luis Guillermo)
Yo no salía de mi asombro ¿Cómo era posible que mamá no nos hablara nunca de eso?

De regreso a Caracas y en almuerzo familiar, esperé a que estuviéramos todos presentes para contar lo sucedido, anécdota que mamá confirmó con la tía Aurita presente. De allí en adelante la tarde transcurrió recordando aquellos sabrosos tiempos pasados con la familia Cruz.

Ahora cada vez que tengo la oportunidad con gran orgullo, cuento la historia.

Luis Guillermo Marcano Radaelli
Caracas 2006

2 comentarios:

  1. Excelente anécdota que da cuenta del orígen de la canción. Luis Cruz no ha sido homenajeado como se merece . Fue un gran compositor y guitarrista.

    ResponderEliminar
  2. Muy agradable la relafica del señor Luis Guillermo, nadie sabia esa historia , muy interesante , el no lo comente pero tiene que ser aquella....Ay que noche tan preciosa , esa cancion sera eterna en los recuerdos del venezolanos . Muchas gracias.

    ResponderEliminar