jueves, 25 de diciembre de 2014

RIP VAN WINKLE.

Hoy vino a mi mente uno de los primeros cuentos infantiles que leí sin ayuda de mayores,  un clásico norteamericano escrito por Washington Irving, se trata de “Rip Van Winkle”. 

Siempre me encanto, no se si fue por lo misterioso del cuento o por que al fin podía leer y releer a mi antojo cuando no entendía algo.

Hoy que se celebra el nacimiento del Niño Dios, quiero obsequiárselos como regalo de Navidad, y comienza así:

RIP VAN WINKLE

Hace muchos años, en un pueblito de las montañas de Norteamérica, vivía un buen hombre de ascendencia holandesa, que tenia un defecto: era muy holgazán; le gustaba dormir mucho, mas sin embargo era un hombre simpático y le gustaba ayudar a los demás y todos le querían en el pueblo. Se llamaba Rip Van Winkle.

A Rip lo que más le gustaba era cazar y se pasaba días enteros en las montañas con su perro, alejado de su esposa que lo regañaba por irse al bosque. De esa unión tenían un hijo mayor y una pequeña hija.

Un día, después de cazar, Rip se sintió cansado y busco un árbol frondoso que le diera bastante sombra y brisa, para así poder echar una siesta. Al cabo de unos minutos, escuchó de pronto una voz que le gritaba:
- ¡Rip Van Winkle!  ¡Rip Van Winkle!

Se incorporó de inmediato y volteó asustado. No podía creer lo que veían sus ojos, era un hombrecito muy pequeño, con barba y con el pelo muy largo, que cargaba un gran barril lleno de una bebida rara.

El hombrecito le pidió a Rip que lo ayudara a cargar el barril. Rip hizo lo propio y  lo siguió. Luego de un buen rato, por fin llegaron a un lugar del bosque, donde muchos hombrecitos de largas barbas celebraban una fiesta.

Ellos le ofrecieron a Rip de beber y como tenía tanta sed, tomó muchos vasos de la extraña bebida, hasta que se quedó profundamente dormido.

Cuando despertó, estaba en el lugar donde había encontrado al hombrecito con el barril. ¡Todo le parecía increíble! Buscó su escopeta y encontró un arma vieja y oxidada.

Molesto, pensó, que el hombrecito se la había cambiado por una escopeta vieja. Rip comenzó a caminar hacia el pueblo.

En el trayecto no se cruzó con nadie conocido, sólo con unos cuantos extraños que lo miraban con curiosidad. Cuando llegó al pueblo, se tocó la barba y comprobó que le había crecido hasta la cintura. Corrió hasta el aparador de una tienda, para ver su rostro reflejado y descubrió que tenia el cabello blanco. ¡Todo era muy raro! ¿Que le había ocurrido? ¿Quiénes eran esos extraños? ¿Dónde estaban sus vecinos? ¡Había muchas casas nuevas!
 
- “La bebida de anoche me hace ver visiones”, pensó.

Cuando llegó a casa sólo encontró un montón de ruinas. Pronto se vió rodeado de gente que le preguntaba quién era.

- ¡Soy Rip, Rip Van Winkle! ¿Es que nadie me conoce?

Entonces, una joven con un niño en brazos le dijo:

- ¡Yo soy tu hija! Hace veinte años que te fuiste de casa y todos pensamos que habías muerto.

Rip, sorprendido, abrazó a su hija, a su nieto y le contó su aventura. Después ella le contó que su hermano y su madre habían fallecido. Rip no entendía bien lo que le había ocurrido.


Desde entonces todos los días narraba su historia a quien se lo pedía, y todos en el pueblo soñaban con tomar un trago de aquella bebida mágica y vivir la fantástica aventura de Rip Van Winkle.

Grisseld LecunaGarcia/Bavaresco

http://www.cuentosdedoncoco.com/2010/12/rip-van-winkle-cuento-infantil.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Rip_van_Winkle#mediaviewer/File:QuidorRipVanWinkle.jpg








2 comentarios:

  1. Ese no es el cuento completo, el cuento original en mucho más largo...
    Y no es un cuento de niños ¬¬

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    1. En el mundo de los humanos cada quien tiene su modo de ver y pensar. No digo que no tienes razón. Pienso que la tienes...... pero yo lo tomo de mi experiencia; de niña lo leí de un libro que me regalaron y desde entonces asi lo recuerdo. Para mi (desde mi perspectiva), es y seguirá siendo un cuento infantil al cual recuerdo y adoro. Saludos.

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